Hace unos días mi amigo Koldo me hacía llegar una reflexión a raíz de una fotografía del fotógrafo holandés Berndnaut Smilde donde se hace patente como, de forma soterrada y sin darnos cuenta, se nos ha acostumbrado ya a considerar cualquier fotografía como un montaje y/o efecto digital.
"Nimbus II, 2012" ©Berndnaut Smilde
La fotografía en cuestión muestra una habitación vacía con una nube blanca en el centro. La imagen, de una estética preciosa, a practicamente todo el mundo le parece ya normal, curiosa, pero normal, dentro de lo que nos tiene ya acostumbrados el mundo publicitario, el cine, y por supuesto la fotografía digital que en estos últimos años ha sido devorada por los recursos de photoshop.
Lo curioso de esta fotografía de Berndnaut es que la fotografía es real. No es un montaje ni un efecto creado con Photoshop. La nube es de vapor y se ha generado realmente dentro de la habitación. Perfectamente iluminada, sin sombras, y como resultado esta fotografía que para el común de los mortales, si no sabe estos detalles, no deja de ser una más en la inmensidad del mundo visual.
Ahora que ya sabemos los detalles, la fotografía coge más valor. Y es que realmente lo difícil es saber crear imágenes sin la ayuda de un ordenador. Las dificultades para llevar a cabo lo que tu imaginación ha producido, buscar los recursos, saber iluminar, y finalmente conseguir la imagen es fotografía con mayúsculas.
Hoy dia en la mayoría de agencias y estudios, los fotógrafos se limitan a aportar el equipo, enfocar y disparar. Después ya vendrá el creativo digital que eliminará brillos, sustituirá fondos y dejará la fotografía para publicar, perfectamente retocada. Particularmente a mi me resulta curioso que este resultado final digital lo que pretende es conseguir una imagen que sea lo mismo que hace una década se producía de forma «analógica», sabiendo de fotografía.
Yo en el estudio actualmente sigo produciendo imágenes de forma convencional. Ilumino, elimino brillos y reflejos con reflectores y gobos, en definitiva, busco la imagen final acabada en el fichero RAW. Otros fotógrafos que se han incorporado al mercado sin haber pasado por el proceso de aprendizaje, simplemente se dejan llevar en la nube de photoshop. El resultado en definitiva es el mismo, pero ¿es la misma satisfacción? El debate está servido…
©Andrés López / countrysessions.org
