La Tarántula española

Una de las arañas más grandes de nuestro país es la Araña lobo (Lycosa tarantula), un invertebrado fascinante que hoy os mostramos, a través de la cámara de nuestro fotógrafo Andrés López.

©Andrés López / countrysessions.org

Hasta que se descubrieron las grandes arañas del continente americano, la Lycosa tarantula era el arácnido más grande de Europa, y como tal, se le denominaba «tarántula». Una vez conocidas las grandes arañas migalas sudamericanas, nuestra tarántula pasó a conocerse como Araña lobo. Sin embargo, esto no quita ni un ápice de majestuosidad a este fantástico animal.

La araña lobo está presente en prácticamente toda la geografía española. El macho, como el de las fotografías que hoy os mostramos, suele ser más pequeño y de color más claro, mientras que la hembra es más grande, más gruesa y con franjas oscuras en las patas. Otra de las grandes diferencias entre ambos sexos es como desarrollan su vida: mientras que el macho es un animal errante que pasa toda su vida recorriendo los territorios donde vive, la hembra desarrolla toda su vida en una guarida bajo tierra, donde permanece oculta, y desde donde atrapa a sus presas cogiéndolas por sorpresa saliendo de su agujero en el momento que pasan cerca de la entrada. Se sirve para ello de una pequeña pero elaborada telaraña alrededor de la entrada del agujero en forma de embudo que le sirve para detectar las vibraciones de los incautos insectos que pasan cerca. Esta guarida puede llegar a medir 30cm de profundidad en vertical, y es muy fácil de encontrar en nuestros paseos por el campo.

Como todas las arañas, nuestra tarántula europea es un animal detestado por los humanos. Es una araña, y como todas, tienen la desgracia de caer mal a hombres, mujeres y niños. Además, en el caso de la lobo, su gran tamaño acrecienta aún más esa repulsión.

©Andrés López / countrysessions.org

Por si fuera poco, nuestra bella tarántula tiene también sus propios enemigos: aves, erizos, y especialmente el escorpión, que tiene debilidad por esta araña. Así que la vida de la araña lobo, no es ni mucho menos fácil.

Como araña que es, también tiene veneno, aunque ni mucho menos es tan peligroso como puede estar pensando algún lector que esté hoy descubriendo a este animal en este artículo. La picadura, a través de esos grandes quelíferos que posee en la boca puede llegar a ser dolorosa, pero en absoluto mortal, y no es más doloroso que la de una picadura de abeja.

©Andrés López / countrysessions.org

Durante la Edad Media, se creía que para vencer el veneno de la araña lobo, había que bailar. En Italia estuvo bastante arraigado, pero también en zonas de España como el Alto Aragón, y hasta el día de hoy que nos llegan aquellas costumbres y tradiciones con el «baile de la tarántula» o de la «tarentola», un baile espasmódico y convulsivo que servía para auyentar el dolor y el miedo a la muerte por la picadura. Varios músicos y sociedades culturales han profundizado en estas tradiciones culturales y se puede encontrar algo de información sobre esto en varios foros y webs.

Lejos de creer en estas historias antiguas, y abrazando la ciencia más absoluta, seguimos prefiriendo ver a esta fantástico animal como una perfección absoluta de la evolución, un depredador peludo y especializado que merece todo el respeto por nuestra parte. Admirémoslo, disfrutemos viendo fotografías que destacan sus detalles inapreciables a simple vista, y la próxima vez que salgamos al campo, busquemos una guarida en el suelo, y con una pajita fina, intentemos hacer salir a nuestra tarántula española para admirar su belleza natural.

©Andrés López / countrysessions.org