Dias soleados de invierno. Sequía en los pantanos

Cuando llevamos muchos días de invierno soleados y con una temperatura agradable para el cuerpo, solemos decir que hace buen tiempo. Pero ¿ésto es verdad en realidad? La consecuencia es que el campo deja de acumular agua y los pantanos bajan su nivel, con los consiguientes efectos sobre el futuro de las cosechas, los bosques y las reservas para el agua de beber en las ciudades.

Al margen de los macro pantanos de utilidad discutible, porque evaporan mucha agua y anegan grande extensiones de terreno, en la cola del pantano de Alcántara de Extremadura, se encuentra uno de sus afluentes, el río Almonte, que «gracias a la sequía,» dejó  a la vista antiguos puentes  y  paisajes de singular belleza que mostraban los estratos de rocas y pizarras, cuyos colores resaltaban cuando éstas se encontraban en la zona de  sombras.

En realidad el río Almonte es una singularidad en la península Ibérica, ya que al parecer, junto con otro río de Portugal, son las únicas cuencas que no han sido fraccionadas y compartimentadas mediante presas.  Éstas aunque legalmente están obligadas a conservar sistemas para que los peces y la fauna puedan superarlas sin dificultad, raramente éstos lo cumplen  de forma operativa, además  de que siempre hay especies invasoras que atacan a la fauna autóctona.

Este río ya estuvo amenazado por la construcción de un embalse varias veces, pero la protesta ecologista bien fundamentada en un informe por la Asociación por la Arquitectura Rural Tradicional de Extremadura  (ARTE) con más de 32 técnicos de las más diversas especialidades (botánicos, zoólogos, físicos, geólogos, arqueólogos, historiadores, filólogos, geógrafos, naturalistas, etc.) se sigue conservando.

Es zona ZEPA  y zona LIC (Lugar de interés cultural). Es el corredor natural para la difusión de numerosas especies como el corzo y la nutria, de la que Extremadura es junto con Galicia destacada representante en su conservación.

Existen bosques de acehúches y  en su terreno hay ejemplares de águila imperial, cigüeña negra, nutrias, búho real, águila perdicera, águila real, alimoche, buitre leonado.  Además de la riqueza ecológica que  esto supone, hay que añadir las aportaciones del turismo ornitológico a la zona.

Posee  varias piezas históricas de ingeniería del agua, como molinos, puentes, acequias, etc. y restos históricos de culturas calcolitícas, de la edad de bronce, de la edad de hierro o romanas, por poner algunos  ejemplos.

Nace 125km arriba, con unas aguas purísimas gracias a la composición del terreno y tiene el riesgo, si se construye una presa, de la invasión de especies exóticas sobre su riqueza de fauna piscícola, una de las mejor conservadas.

Fotografías y texto: © Pablo S. Torras / countrysessions.org