Prohibido fotografiar (donde no se debiera).

El próximo domingo 19 de abril se clausura de forma definitiva «Star Wars -The Exhibition» en Madrid. Una fantástica muestra que recoge maquetas, disfraces y objetos originales creados para los rodajes de la saga que creara en los años setenta George Lucas.

©Andrés López / countrysessions.org

Reconozco que soy un verdadero friki de Star Wars. Crecí con Luke Skywalker, el maestro Yoda, la princesa Leia y Han Solo. Hace unas semanas me informé que la exposición que desde noviembre se encuentra en la Fundación Canal, en la Plaza de Castilla de Madrid se había prorrogado, debido al gran éxito, hasta el próximo domingo 19 de abril. Así que algo tan visitado (hace dos semanas se celebró el visitante 250.000) debía ir a visitarlo, sino no me podía seguir considerando a mi mismo un fan de Star Wars.

Y lo cierto es que me lo pasé bomba. Para todos los que habeis disfrutado con estas pelis, en esta exposición tenéis la oportunidad de apreciar con todo lujo de detalle y a excasos centímetros  la marioneta original de Yoda que fue construida para El Imperio Contraataca, el pesado y gigantesco disfraz que dió vida a Chewaka, el imponente uniforme de Dar Vader, o los inmortales R2D2 y C3PO.

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Trajes originales, disfraces y uniformes, así como maquetas originales de naves y vehículos a distintos tamaños que fueron utilizadas para rodar las seis películas. La exposición está organizada en ocho salas temáticas y todo aderezado con pantallas donde se pasan documentales inéditos sobre el proceso de rodaje y creación de criaturas, escenas y efectos especiales que, en el caso de las tres primeras cintas, fueron un hito en la historia del cine de ciencia ficción.

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Armado con mi cámara compacta Leica me recorrí toda la exposición en compañía de mi hijo de 7 años, y disfruté de lo lindo fotografiando todos estos objetos únicos y originales. La exposición se presta a ello, iluminada con mucho gusto y que anima a cualquier aficionado a la fotografía a emplearse a fondo consiguiendo estupendos retratos y fotografías de maquetas. Todos los objetos están en vitrinas, por lo que hay que estar muy pendiente de los reflejos del cristal. Así mismo, hay que abstenerse de usar el flash porque rebota en el cristal y no conseguiríamos hacer ninguna fotografía. El truco está en subir el ISO lo suficiente para conseguir una apertura adecuada, buen pulso y algo importante: pegar el objetivo al cristal.

Todas las fotografías de esta noticia de hoy están tomadas con una Leica C-Lux compacta, sin flash y un ISO 400.

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Una de las cosas que realmente llama la atención para un fotógrafo es que en la publicidad, webs e incluso en la propia sala y  en el folleto que te entregan cuando adquieres la entrada se especifica en mayúscula y claramente «SE PERMITE HACER FOTOGRAFÍAS EN LA EXPOSICIÓN«. ¡iNCREIBLE! No recuerdo cuando pude hacer uso de mi cámara en un evento de este tipo. Desde hace ya muchos años, prohibir la fotografía y el video es un «deporte nacional» en eventos, exposiciones, museos y otros espectáculos. Nunca he comprendido esta postura prohibitiva. Evidentemente en numerosas ocasiones el propósito es que compres en la tienda correspondiente la postal, poster o libro de lo que has visitado, pero el asunto es curioso porque esta exposición sobre Star Wars es lo más mercantilista y publicitario que se puede uno imaginar. La saga Star Wars está de toda la vida vinculada a libros, juguetes y una enorme y planetaria campaña comercial sin parangón, pero mira tu por donde, en la exposición de Plaza Castilla te dejan hacer fotos hasta de los tornillos.

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LA PARADOJA

Perpendicularmente opuesto a esta curiosa situación, en el mes de febrero hice un viaje corto a Cantabria. Allí me hablaron de la Cueva de El Soplao, una macro cueva minera espectacular que hace unos años el Gobierno de Cantabria había remodelado con un presupuesto millonario. Los amigos que me pasaron la información me dijeron textualmente «pasate a verla poque merece la pena… además seguro que tu haces unas fotos que te cagas…» Así que para allá que fuí una mañana, cargado con mi equipo fotográfico y mi trípode. Después de llegar hasta un impresionante edificio vanguardista en medio de las montañas cántabras, con una infraestructura digna de un museo de arte contemporaneo (se notaba la pasta que se habían gastado en arquitectos) me voy todo chulo para la taquilla y ¡SORPRESA! PROHIBIDO HACER FOTOGRAFÍAS O TOMAR VIDEO CON NINGÚN MEDIO, INCLUIDO MOVILES.

El cabreo que cogí fue soberano. Me dió igual hablar con las chicas de taquilla, que tan solo saben contestar: «está prohibido. Son las normas«. La visita es guiada en grupos de unas 20 o 30 personas. La cueva iluminada de forma espectacular es un lugar maravilloso para cualquier aficionado a la fotografía, y NO DEJAN HACER FOTOS. Fué realmente desagradable hasta el punto que una persona del grupo donde iba yo, en un descanso, preguntó a la guía de forma educada si podía hacer una foto a sus hijos en aquel espectáculo de la Naturaleza y la contestación fue igual de tajante: Totalmente prohibido, y para asegurarse que nadie se salta la prohibición, la cueva está literalmente blindada con cámaras de televisión para vigilar todo lo que ocurre en las distintas pasarelas. Además en la web oficial no especifica en ningún sitio esta prohibición, algo que debería estar indicado para que gente como yo vaya avisada.

CONCLUSIÓN

¿Por qué el Señor George Lucas, creador de Star Wars, y al mismo tiempo el mayor interesado en que sus juguetes, posters, libros y postales se vendan en todo el mundo, me deja usar la cámara fotográfica en una exposición con sus objetos, maquetas y disfraces, y sin embargo el Gobierno de Cantabria y el organo gestor de la cueva que hace uso de un bien natural y cultural de todos los ciudadanos, prohibe la fotografía y el video de forma tan radical?

¿De donde ha salido el dinero para la remodelación de la Cueva de El Soplao, para que sea tan interesante prohibir la toma de fotografías en beneficio de la venta de postales?

¿Cual es el interés por el que no se permite a un padre de familia hacerse una foto con sus hijos en una cueva convertida en expectáculo natural como cualquier otro Parque Natural o Nacional de este país?

Y por último ¿en este artículo de hoy cual de las dos atracciones han tenido mejores imágenes y por lo tanto, mejor publicidad en base a las fotografías publicadas?

Posiblemente si excarvamos en el asunto, podríamos obtener por respuesta que los flashes deterioran la cueva, pero si esto es así ¿no deteriora más la gran infraestructura de iluminación y efectos luminosos que se ha instalado en la cueva y que cada 15 minutos se pone en funcionamiento con cada grupo de visitantes?

Evidentemente no puedo recomendar a ningún fotógrafo que lee asiduamente este blog que visite El Soplao. Se debería hacer un boicot total contra este sitio y el gobierno de Cantabria en este sentido. No hay ningún derecho a que un ciudadano no pueda hacer una fotografía, dentro de unas normas básicas, en esta cueva. que es un patrimonio natural y cultural de todos y todas.

De hecho estoy valorando seriamente iniciar una lista de «LUGARES VETADOS PARA FOTÓGRAFOS» y seguramente empezaré la lista con la Cueva de El Soplao.

©Andrés López / countrysessions.org