En esta ocasión volvemos a Liencres pero para observar más las características de sus dunas que las formaciones rocosas de la costa.
Este paraje de la costa Cántabra es tan singular que parecería que los fotógrafos de Countrysessions nos hemos puesto de acuerdo para visitarlo cada uno por su cuenta este año.
© Pablo Torras/www.countrysessions.org
La costa de Liencres es realmente espectacular, especialmente en sus atardeceres y amaneceres, pero éste no es el momento en que la gente elige para visitarla, sino que en su mayor parte se dirigen a ella en las horas centrales del día para darse un refrescante baño cuando más aprieta la canícula, y es que la temperatura de sus aguas no puede compararse con las del Mediterráneo. Ésta es más bien propicia para disfrutar de un agradable paseo naturista por la playa o bien para deportes realmente activos como volar sobre la cresta de las olas en una tabla de surf.
© Pablo Torras/www.countrysessions.org
A parte de por las formaciones rocosas del litoral, Liencres es famosa por las dunas que han dado lugar a que sea declarado Parque Natural. No en vano es el claro ejemplo de cómo pueden evolucionar unas dunas, que podrían ser muy inestables merced al potente viento, y que gracias a las sucesivas capas de vegetación quedan fijadas al suelo.
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En efecto, como reza en el cartel del parque, hay diferentes líneas de plantas que van desde pequeños ejemplares a ras del suelo hasta un pequeño pinar, cuya sombra se agradece, ya que la diferencia de temperatura dentro de él puede llegar a ser de varios grados.
© Pablo Torras/www.countrysessions.org
Además, nos evitará que quedemos totalmente abrasados por los rayos solares, ya que este paseo fue totalmente improvisado y se produjo sólo como parte de una primera exploración para aprovechar que veníamos de camino de otros parajes cercanos.
© Pablo Torras/www.countrysessions.org
Texto y Fotografías: © Pablo Torras/www.countrysessions.org
