Los noruegos y su afición a los coches antiguos.

De nuevo y de manos de nuestro fotógrafo Angel Trótter, volvemos a las tierras de Noruega para conocer más detalles sobre aquel país y sus gentes.

©Angel Trótter / countrysessions.org

Volvemos con más detalles de las tierras vikingas. En esta ocasión he escogido dos fotos de esta casa con su coche en la puerta a modo de «american dream». Pero no se trata de una casa en Nasville, Arkansas o New Orleans, sino de una «típica» estampa que está por todo el país.

Son muchos lo noruegos que tienen en su casa un coche de este porte  o un Jaguar descapotable de hace 40 años, o un Buick para lucirlo sin la capota, a nada que salga un rayo de sol.

Frente a la amabilidad que caracteriza a toda la población de Noruega, tuve un encontronazo con el dueño de la casa y el coche, que no estaba muy de acuerdo en que fotografiase su propiedad. El hombre era el típico vikingo de más de metro ochenta, rubio y con unas espaldas dignas del mismísimo Jhonny Weysmuller. Trás una brevísima charla con él acerca de la geografía de España y del motivo de mi estancia en su casa, decidimos poner pies en polvorosa, no sin antes deleitarnos con la estampa de su bellísima esposa haciendo una barbacoa en la parte posterior de la casa.

Me advirtió que no le gustaban la fotos y que no era bienvenido, además de decirme que en esa zona había muchos robos. Debió de confundirme con un ladrón de coches. A parte de esta joya, mi amigo Snorre (nombre cariñoso que decidimos ponerle) tenía un Golf, un Mercedes deportivo, una pick up Mitshubisi y una tartana que no recuerdo de que marca era.

©Angel Trótter / countrysessions.org